¿Por qué Dios permite que personas inocentes sufran?
Esta es la pregunta más frecuente con respecto a Dios. Si Dios es amoroso, ¿por qué prosperan las personas malignas y perecen las personas inocentes? ¿Por qué Dios no interviene para ayudar, rescatar y salvar? Millones de personas murieron en la Segunda Guerra Mundial. Hoy, muchas personas inocentes en todo el mundo siguen muriendo en tiempos de guerra y de paz. Los bebés nacen con malformaciones. Niños y adultos quedan paralíticos. Los adultos mayores se quedan inválidos. Hay asesinatos sin sentido, mentiras, engaños, hurtos, robos dentro y entre naciones y de grupos étnicos, en "malos vecindarios" y "buenos vecindarios" y en las familias. ¿Quiénes son las víctimas? Principalmente personas inocentes: niños, ancianos y gente buena. ¿Dónde está Dios? ¿No es Él un Dios amoroso? ¿Acaso no creó Él al hombre? ¿Por qué Él no ayuda? ¿Por qué permite que esto suceda? ¿No tiene Él el control? Necesitamos volver al principio para ver por qué las cosas son como son y si hay una solución a este problema que enfrenta toda la humanidad.
La batalla de dos reinos
La Biblia nos dice que antes de que el hombre fuera creado, Lucifer, el arcángel que había sido designado por Dios para ser la cabeza de todos los ángeles (Ezequiel 28:14), (Judas 9) se rebeló contra Dios y se convirtió en el enemigo de Dios, Satanás (Isaías 14:12), (Ezequiel 28:15). Como resultado, el pecado entró en el universo e hizo de él un lugar caído. La tierra se convirtió en el reino de Satanás (Lucas 4:6). Desde entonces, ha habido una lucha entre estos dos reinos, el de Dios y el de Satanás (Isaías 14:12-15), (Colosenses 1:13). Esta es la fuente de toda la muerte, la miseria y el caos en el universo: la batalla entre Dios y Satanás.
El hombre fue creado para expresar a Dios y gobernar para Dios
Pero Dios tenía un plan para darle fin a Satanás. Dios quería que otra de Sus criaturas, el hombre, derrotara a Satanás. El hombre fue hecho por Dios a Su imagen para expresar a Dios y gobernar para Dios (Génesis 1:26). Expresar a Dios es amar como Dios ama, ser justos como Dios es justo, etc. Dios tiene muchos atributos divinos, y el hombre fue creado con las virtudes humanas que corresponden con dichos atributos. El hombre debería vivir una vida que expresa los atributos divinos de Dios a través de sus virtudes humanas (Mateo 5:48). El hombre también fue hecho para gobernar para Dios como Su autoridad delegada en la tierra para derrocar y reemplazar a Satanás y traer el reino de amor y justicia de Dios (Mateo 22:39), (2 Corintios 5:21).
El hombre fue creado perfectamente. No se enfermaría ni moriría. Dios proporcionó todo lo que el hombre necesitaría para vivir: le dio al hombre aire, agua, comida y luz solar para sustentarlo; y árboles, flores, plantas y animales para hacer que la tierra fuera acogedora, hermosa y llena de vida. Luego, para permitirle al hombre conocer a Dios, expresar a Dios y gobernar para Él, Dios formó un espíritu dentro del hombre y puso al hombre delante del árbol de la vida (Génesis 2:9), (Zacarías 12:1). El árbol de la vida representa a Dios quien llega a ser vida para el hombre. Si el hombre tomara a Dios en su espíritu al comer el árbol de la vida, el hombre tendría a Dios como vida y sería capaz de expresar a Dios y gobernar para Dios.
La mayor tragedia del universo
Aunque la intención de Dios se habría cumplido si el hombre hubiera comido del árbol de la vida, Dios creó al hombre con libre albedrío, para que el hombre pudiera elegir entre Él y Satanás, quien está representado por el árbol del conocimiento. Satanás se disfrazó, y con astucia, engañó al hombre haciendo que el árbol del conocimiento pareciera muy placentero (Génesis 3:1), (2 Corintios 11:3). El hombre eligió el árbol del conocimiento y, por lo tanto, en lugar de recibir la vida de Dios, recibió la vida satánica dentro de sí, lo cual resultó en pecado, maldad y muerte (Romanos 5:12). La vida satánica ha ido creciendo en el hombre durante miles de años.
Debido a que el hombre tomó la vida de Satanás, el hombre está bajo el control de la naturaleza satánica internamente, así como bajo la autoridad de Satanás externamente (Efesios 4:17-19), (Romanos 7:23). La Biblia llama a Satanás "el dios de este siglo" (2 Corintios 4:4). El hombre está cegado por él y es inconsciente de lo que el maligno está haciendo fuera de él y dentro de él (1 Juan 5:19). El deseo de Satanás es arruinar y matar al hombre. El Dios real y viviente creó al hombre, pero el dios de este siglo se introdujo en el hombre. La tragedia universal es que el mismo hombre que iba a ser un rey que vive en el reino de Dios se ha convertido en un esclavo que muere en el reino de Satanás ( Hebreos 2:14-15). Por eso hay guerras, injusticias y opresión. Satanás está destruyendo al hombre que Dios creó, por lo tanto, la condición presente no es la intención original que Dios tuvo.
La manera en que Dios salva al hombre del sufrimiento
Dios amaba al hombre y todavía quería salvarlo del sufrimiento y llevarlo de regreso a Él (Romanos 5:8). Dios dio algunos pasos específicos a fin de lograr la derrota de Satanás, sanar al hombre e introducir Su propio reino. Primero, Dios mismo vino a la tierra como un hombre llamado Jesucristo hace 2.000 años (Juan 1:1,14), (Mateo 1:21). Él como hombre estableció un modelo para nosotros, mostrándonos cómo los hombres pueden amarse unos a otros y vivir rectamente por la vida de Dios (Juan 6:57), (1 Juan 4:7). ¡Satanás intentó corromper a este hombre y someterlo, pero este hombre perfecto no sucumbió a ninguna de las tentaciones de Satanás! (Mateo 4:9-10). Él era el reino de Dios que consistía de un solo hombre. Satanás no tenía nada en Él (Juan 14:30). Jesús no tenía la naturaleza satánica; por lo tanto, Él estaba libre interiormente de la tiranía de Satanás. Sin embargo, no deseaba ser el único hombre que luchaba contra Satanás para recuperar la tierra. Quería que muchos otros se unieran a Él en esta lucha.
Es por esto que Él murió para pagar un rescate por toda la humanidad a fin de redimirlos del justo juicio de Dios sobre el pecado y resucitó para ser la vida del hombre (1 Pedro 3:18), (1 Pedro 1:3), (1 Corintios 15:45). Ahora el camino ha sido abierto para que el hombre tome a Dios como vida en su interior, exprese a Dios y gobierne para Dios, para que, junto con Cristo, pueda vencer al enemigo de Dios y traer Su reino (Hebreos 10:20), (1 Juan 5:11), (Gálatas 2:20), (Apocalipsis 20:6), (Apocalipsis 11:15). Todo esto sucedió hace 2.000 años, sin embargo, la mayoría de las personas no han escuchado ni recibido esta buena noticia. El mundo todavía está en caos porque muchos están bajo el engaño y el control de Satanás que hace que el hombre se oponga a Dios y viva por la naturaleza pecaminosa.
La manera de detener todo sufrimiento
Si quieres salir de este caos y salvar al mundo del reino de Satanás, primero debes ser salvo al recibir a Dios dentro de ti por medio de invocar Su nombre (Hechos 2:40), (Hechos 2:21). Entonces Él puede comenzar el proceso de salvación dentro de ti. Después necesitas propagar las buenas noticias a tus conocidos (Marcos 5:19). Cuando suficientes personas en la tierra estén llenas del Dios de amor y de justicia, el reino de Dios será traído y la condición de esta tierra cambiará radicalmente (2 Pedro 3:13). La gente vivirá en paz, amándose unos a otros (Apocalipsis 21:3-4). No habrá más robos ni asesinatos sin sentido. Todas las formas de maldad serán quitadas de la tierra. ¿Te gustaría ver esto en tu vida? ¿Qué debes hacer?
Puedes pasar del reino de las tinieblas de Satanás al reino de la luz de Dios, y de la autoridad de muerte de Satanás a la autoridad de la vida de Dios (Hechos 26:18). Puedes orar:
“Señor Jesús, entra en mí. Líbrame del reino de Satanás e introdúceme en Tu reino. Perdóname por todo lo que hice bajo la tiranía de Satanás. Sálvame ahora."
Entonces serás parte de lo que Dios está haciendo en el hombre para acabar con todo el sufrimiento en el mundo y traer Su reino a la tierra.